El siguiente artículo es una exploración sobre la naturaleza del deseo. Tiene como finalidad comprender más profundamente porqué deseamos, cuáles son algunas de las funciones del deseo, cómo nos benefician o nos atrapan y de qué forma tienen un impacto en nuestra vida.
La idea de que venimos a este mundo a aprender, a ser mejores, a perfeccionarnos en algo, a “evolucionar” es una idea generalizada que observo en casi todas las personas con las cuales me he relacionado y sigo relacionando. Las observo en personas religiosas y no religiosas y recuerdo también cuando esta creencia me fue enseñada en mi propia vida.
Más allá de los tecnicismos de la Creación Consciente y más allá de las cientos de metodologías (algunas más efectivas que otras y siendo muy particular a cada persona), lo que crea está en la simpleza de la energía que se alinea.
Si pudiéramos resumir la Creación Consciente en una sola palabra, esta sería FE, sería CERTEZA. Y en la certeza no existe la duda.
Sin importar la fe que tengas, lo único que sí necesitas tener es FE para manifestar cualquier cosa en tu vidas: incluso milagros.
La mayoría de nosotros, tiende a conceptualizar la idea de empresa como un ente separado del individuo: la compañía y la persona. Sin embargo, la empresa es una extensión de la persona y es desde esta premisa que podemos dar un vuelco a los resultados de nuestro negocio, si sabemos dónde mirar.
Si bien la incertidumbre es un aspecto constante en nuestra experiencia humana (después de todo, generalmente hablando no sabemos exactamente lo que viene para nosotros en todo momento). Sin embargo, este 2020 pareciera que esta sentimiento se está viendo amplificado (tanto por amenazas de Pandemias como el Coronavirus, crisis sociales, económicas, etc).
Los “trabajador de la luz” son personas que trabajan en mantener la vibración personal y colectiva más en amor que en miedo. Millones de personas son trabajadores de luz sin saber que lo son y estoy segura que muchos de ustedes que me leen saben que lo son ¿cierto?
Hoy me senté a cuestionarme la profundidad de esta afirmación (“la vida me pone a prueba” o “Dios me pone a prueba”), y desgranar las creencias que la sostienen para analizarla juntos.
¿Por qué algunas cosas se te dan fáciles y otras no? ¿Podemos influenciar la realidad en la que vivimos? ¿Es posible sufrir y esforzarnos menos en la vida?
¿Te imagines cómo sería tu vida si simplemente con pedir lo que deseas esto llegara a ti? ¿Es esto posible o una idea irreal? ¿Es verdad que lo que piensas y dices tiene un impacto en lo que llega a ti?